reverendo

con motivo del fallecimiento (ayer) de "reverendo" y dado que no logro encontrar el mp3 que tenia del lp del rudy amstrong quartet, copio la entrada que hice, ya hace unos añitos, en el primero de los blogs que mantuve, "el zurret de artal".

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¿acaso hubo alguna vez once mil vírgenes -santoral aparte-?. no importa. lo preocupante -o no, tampoco tiene mayor importancia- es lo aburridito que es el panora jazzístico nacional del siglo xxi. ¿quien lo iba a decir?. ¡a más -y mejores (que ya es delito), aunque solo técnicamente- músicos, más aburrimiento!!!!.
en madrid, a mediados de los ochenta convivian los divertidisimos clónicos con los no menos hilarantes rudy armstrong quartet. la experimentación vanguardista con la tradición corrosiva populachera. estos últimos hacían de su nombre ya toda una declaración de principios. no eran clónicos. no. lo suyo era un cruce al más estilo tradicional, entre louis armstrog y rudy ventura. la iconografia americana y la patria. rudy armstrog, trompetillas de plastico (esas que se venden en las ferias) y voz; reverendo (al que durante años se vio tocando en programas televisivos del gran wyoming, como cqc -el cual a su vez fue, mas o menos, el vocalista de los rockeros paracelso-) al piano; tom mingus al contrabalde (como su nombre indica era un hibrido de contrabajo y balde de plástico, muy apropiado para realizar la colada), doctor hund la tabla de lavar y la botella (de anís) y "el amigo americano" (una primitiva caja de rítmos). ¡eran un quinteto!!!!.
un pasodoble, el "islas canarias", el "hello dolly" (¡claro!), "quisiera ser" (del dúo dinámico), el trad "bassin street blues" o la inefable "canción del cola cao" (nada que ver con el "beba colo-cao" de la orquestra mirasol, que es ya otra historia) en su primer y único lp -acertadísimo título- grabado para diapason (etiqueta de dial -no "cadena dial", sino el sello que tuvo entre otras su serie doblon de jazz -¡que mal prensado!-). quizá para algunos (¡que importan!) no fueran un grupo de jazz. a mi desde luego no me consta que tuvieran ninguna titulación por berklee (ni siquiera por los entonces en expasión talleres de músicos). unos farsantes, vamos.
¡cuanto se echa en falta que en las pintadas callejeras, en lugar de anagramas y letras de diseño (la generación del petit suisse), se lea garabateado, "la imaginación al poder"!!!!!.