reseña publicada an el diario del altoaragon 7/12/13. Hipopotamo en su salsa No se habla de ella en los programas prime time televisivos, ni los suplementos dominicales, de las publicaciones de mayor tirada del país, le dedican grandes (siquiera pequeños) reportajes, pero la escena libreimprovisadora nacional esta viviendo todo un boom. Y no solo son Barcelona o Madrid los recurrentes focos de actividad. Omega en Galicia; el grupito de músicos de león (Cova, Ildefonso…); Entenguerengue, en Jerez; los sevillanos Hideen Force Trio (que acaban de publicar disco para el referencial sello británico Bruce´s Finfers); el sello discográfico Clamshell de Albacete… Cantidad y calidad mirándose en el espejo del pianista Agusti Fernandez, sin duda una de las grandes figuras de la escena internacional. Raspar y rebuscar en esa escena es encontrar músicos inquietos y con ganas como es el Hipopotam Trio, a quienes se pudo escuchar este jueves en el Juan Sebastian Bar. Tres jóvenes pertenecientes a la escena barcelonesa (aunque proceden de Flix, a orillas del Ebro) que están poniendo en pie una sonoridad de trío muy interesante. El peso de esta, aunque se podría simplificar (cayendo en el error), diciendo que se basa en la guitarra eléctrica de Marcel Bagés, es mucho mas de lo que hace ruido. Más bien se basa tanto en la interacción de sus miembros (llevan un par de años trabajando juntos) como en la combinación entre la sonoridad eléctrica (rockista e incluso ruidista en ocasiones) de Marcel, con el contrabajo (un sonido acústico y muy de palo) de Alex Reviriego en la que la contundencia y los cortes de Genís ejercen de bisagra y ligan la masa. Para la ocasión, venían a presentar “Amphibius”, su primer disco, publicado la pasada primavera por el sello Discordian. Un trabajo que hacía prever un concierto interesante, pero que en el directo queda, además, superado muy de largo. Porque si los hipopótamos se encuentran mejor en el agua, Hipopotam están en su medio en escena. Temas largos, con sonoridades cambiantes. Brutales descargas de adrenalina guitarristica con, salvajes de la frontera, como Thurston Moore o Jim O´rourke por referencia, para pasar a ensoñaciones mas ambient mirando a Bill Frisell. Un continuo juego (Yin y Yang) entre eléctrico y acústico, velocidad y reposo, ruido y silencio… Una propuesta para disfrutar sin medida.
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reseña publicada an el diario del altoaragon 7/12/13.
Hipopotamo en su salsa
No se habla de ella en los programas prime time televisivos, ni los suplementos dominicales, de las publicaciones de mayor tirada del país, le dedican grandes (siquiera pequeños) reportajes, pero la escena libreimprovisadora nacional esta viviendo todo un boom. Y no solo son Barcelona o Madrid los recurrentes focos de actividad. Omega en Galicia; el grupito de músicos de león (Cova, Ildefonso…); Entenguerengue, en Jerez; los sevillanos Hideen Force Trio (que acaban de publicar disco para el referencial sello británico Bruce´s Finfers); el sello discográfico Clamshell de Albacete… Cantidad y calidad mirándose en el espejo del pianista Agusti Fernandez, sin duda una de las grandes figuras de la escena internacional.
Raspar y rebuscar en esa escena es encontrar músicos inquietos y con ganas como es el Hipopotam Trio, a quienes se pudo escuchar este jueves en el Juan Sebastian Bar. Tres jóvenes pertenecientes a la escena barcelonesa (aunque proceden de Flix, a orillas del Ebro) que están poniendo en pie una sonoridad de trío muy interesante. El peso de esta, aunque se podría simplificar (cayendo en el error), diciendo que se basa en la guitarra eléctrica de Marcel Bagés, es mucho mas de lo que hace ruido. Más bien se basa tanto en la interacción de sus miembros (llevan un par de años trabajando juntos) como en la combinación entre la sonoridad eléctrica (rockista e incluso ruidista en ocasiones) de Marcel, con el contrabajo (un sonido acústico y muy de palo) de Alex Reviriego en la que la contundencia y los cortes de Genís ejercen de bisagra y ligan la masa.
Para la ocasión, venían a presentar “Amphibius”, su primer disco, publicado la pasada primavera por el sello Discordian. Un trabajo que hacía prever un concierto interesante, pero que en el directo queda, además, superado muy de largo. Porque si los hipopótamos se encuentran mejor en el agua, Hipopotam están en su medio en escena. Temas largos, con sonoridades cambiantes. Brutales descargas de adrenalina guitarristica con, salvajes de la frontera, como Thurston Moore o Jim O´rourke por referencia, para pasar a ensoñaciones mas ambient mirando a Bill Frisell. Un continuo juego (Yin y Yang) entre eléctrico y acústico, velocidad y reposo, ruido y silencio… Una propuesta para disfrutar sin medida.
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